por Daniel Martos - 27 may 2024
No fue un error ni me puse purista de repente. Y, espero, tampoco fui víctima de un brote místico que mengüe mi atención nerd por el mundo informático... El título que acompaña esta nota fue pensado adrede, para repasar algunos peligros a los que nos exponemos en la era digital, donde nuestros celulares son casi una extensión de nuestras manos.
Pero, ¿alguna vez pensaste en cómo su uso excesivo puede estar afectando tu vida y la de los demás? Aquí te dejo una lista con los "7 pecados celulares" que todos deberíamos conocer y evitar.
1.Nomofobia
La nomofobia es el miedo irracional a estar sin el teléfono móvil. Volvernos ansiosos si nos quedamos sin batería u olvidamos el celular en casa es más común de lo que parece... ¿O vas a negarlo? Este temor puede afectar tu concentración y tu capacidad de disfrutar el momento presente, ya que te pone en un estado de tensión constante al tiempo de inconsciente, que a veces se materializa en actos repetitivos e intermitentes como tantear con la mano en el bolsillo para ver si nuestro celular nos está acompañando en todo momento.
2.Ludopatía
El auge de los juegos de azar en línea, que se viralizan con alta notoriedad, y las apuestas deportivas han convertido a los celulares en casinos portátiles. La facilidad de acceso a bingos online y aplicaciones de apuestas puede llevar a la ludopatía, un trastorno que afecta no solo las finanzas personales, sino también -como todas las adicciones- las relaciones y la salud mental.
3.Bullying
El ciberacoso -comúnmente llamado bullying- es una realidad que afecta a niños, niñas, jóvenes y adultos. Sobre todo a través de redes sociales y aplicaciones de mensajería, el bullying se hizo más persistente y difícil de escaparle. Es clave educarnos -y a los menores de nuestra familia- sobre cómo prevenir y enfrentar esta problemática para proteger a nuestros seres queridos.
4.Porno
El acceso ilimitado al contenido pornográfico, que sobreabunda en internet y donde hasta los menores pueden acceder fácilmente e incluso en forma accidental al clickear en un aviso tipo “spam”, puede distorsionar la percepción de las relaciones y la sexualidad. Además, puede llevar a la adicción, afectando negativamente las relaciones personales, nuestro desempeño laboral o académico y el bienestar emocional.
5.Infoxicación
La sobrecarga informativa o infoxicación, es el resultado de estar constantemente bombardeados con noticias, notificaciones y actualizaciones. Esta saturación puede generar estrés y dificultar la toma de decisiones, ya que nos resulta difícil distinguir entre información relevante e irrelevante. Por suerte -o por la providencia, cada cual dirá- en Un Ratito Más buscamos evitar estos problemas y siempre respaldar nuestras notas con conocimiento previo y/o investigación específica.
6.Phubbing
¿Alguna vez te sentiste ignorado porque la otra persona no dejaba de mirar su celular? Eso es phubbing, una mezcla de las palabras “phone” (teléfono) y “snubbing” (desairar). Este comportamiento puede dañar seriamente las relaciones interpersonales, haciendo que los momentos juntos se sientan menos significativos.
Este “pecado” es primo cercano del Ghosting, situación que se da cuando una persona deja de contestarle a la otra en las redes o aplicaciones de mensajería, equivaliendo esto a la “ley de hielo” de antaño. La diferencia entre phubbing y ghosting radica principalmente en la intención -o grado de conciencia- de la persona que lo realiza, aunque para la persona que es ignorada, suele tener el mismo grado de gravedad.
7.Sexting
El envío de mensajes, fotos o videos con contenido sexual explícito puede parecer inofensivo, pero tiene sus riesgos. Además de la posibilidad de que ese contenido se filtre y se vuelva viral, el sexting puede exponer a las personas a situaciones de chantaje o acoso.
Estos "pecados celulares" nos invitan a reflexionar sobre el uso que hacemos de nuestros celulares y a buscar un equilibrio que nos permitan aprovechar sus ventajas sin caer en las trampas que trae la modernidad. Porque, al final del día, el control lo tenemos nosotros... Y si te viste reflejado en alguno de ellos, siempre es posible salir adelante con decisión; y en algunos casos más complicados, con la ayuda de un profesional.