por Juan Carlos Latrichano - 12 nov 2018

 

Como sabemos, el Gobierno del presidente Macri comenzó con la unificación cambiaria. De este modo, el tipo de cambio oficial tomó el valor del precio marginal de la divisa al momento de la asunción. El Dr. Prat Gay, anterior Ministro de Economía, consideró que esta medida no tendría consecuencias inflacionarias debido a que los precios ya se habían ajustado por la paridad marginal. No fue así. Los precios subieron tal como suben si se produce una devaluación no compensada. La inflación del año 2016 fue de un 41%. La balanza comercial fue levemente positiva y la actividad económica se contrajo.

 

En el año 2017 se utilizó el ancla cambiaria. El dólar subió poco. Los precios crecieron un 24.5%. La actividad económica creció produciéndose a su vez un enorme déficit de la balanza comercial.

 

En el presente año se produjo un enorme devaluación (100%) con alto impacto en los precios (la inflación del año sería cercana al 50%). Ello, debido fundamentalmente a la dolarización de las tarifas.

 

En medio de todo esto y sintetizando, advertimos que la devaluación de este periodo de Gobierno ronda el 300%, sin que la misma haya logrado revertir la situación externa. La pequeña mejora de septiembre obedece a la caída de la producción más que a la mejora cambiaria.

 

Es momento de meditar todo esto y producir un cambio de la actual política.